Son muchas, alrededor de 45, las personas que han pasado por Fundar y casi todas tienen algo que les une: el deseo de que Ester Fonfría dimita o sea cesada. Alegan para ello los 13 despidos improcedentes, 23 bajas voluntarias y 9 contratos no renovados que configuran el panorama de una organización que, ni por su equipo, ni por su objeto social, merece tan discutido mérito. Y por si todo esto fuera poco, en lo que llevamos de 2007, siete compañeros han sufrido bajas por ansiedad, estrés o depresión. La situación parece insostenible y la máxima responsable es la persona que está detrás de estas cifras, la gerente de la entidad, Ester Fonfría.